| ¡Saludos! Bienvenidos al boletín de Materia. Soy Javier Salas y hoy os traigo incertidumbres científicas y pronósticos. O como resumieron La Buena Vida: ¿Qué nos va a pasar?
- Si te han enviado este boletín y te quieres suscribir, puedes hacerlo ahora apuntándote aquí 📬
1. 🔮 Sin bola de cristal
Durante las primeras semanas de erupción en La Palma, mucha gente tuvo la ocurrencia de criticar que se construyeran pueblos junto a volcanes. Desde esa perspectiva, no se podría edificar en ningún punto de la provincia de Santa Cruz de Tenerife. No porque sepamos dónde están los volcanes, sino precisamente porque no sabemos dónde van a surgir. Canarias sigue viva, creciendo, y lo hacen con erupciones que nunca repiten volcán, siempre son nuevos (ojo, palabro: son monogenéticos). Y esto añade un límite de origen: no sabemos pronosticar erupciones. Bueno, un poco sí. La vulcanología puede predecir erupciones, pero con brocha gorda. Por compararlo con los pronósticos meteorológicos, ahora estamos en la fase de pronosticar lluvia cuando ya hemos visto los nubarrones negros. Es lo que pasó en La Palma: las autoridades empezaron a evacuar a la población de la zona afectada por la erupción antes de que se produjera. Porque la isla se estaba deformando —magma que empuja desde abajo— y el enjambre de terremotos subía sin freno hacia la superficie —magma que rompe la corteza en su ascensión—. Los nubarrones ya están encima: toca ducharnos. Tenemos algunos casos en los que la vulcanología ha podido pronosticar, pero por lo general es un campo que está todavía casi en pañales. Esta semana, la revista Science publicaba un artículo que se preguntaba si lo que sucede ahora en Cumbre Vieja puede darnos claves para mejorar esa capacidad de adelantarnos a las erupciones y a calcular cuánto durarán. Aproveché esa percha que me daba Science —percha es como los periodistas llamamos a inventar un pretexto— para ahondar en este asunto hablando con especialistas. Como la investigadora Teresa Ubide: "En geología y vulcanología, el pasado es la clave para el futuro. La Palma está mejorando el conocimiento de cuál es la personalidad de este volcán en un momento en el que la capacidad de monitoreo volcánico ha mejorado exponencialmente con relación a erupciones anteriores". Lo llamativo: descubrir que en EE UU están peor que nosotros, con muchísimos de sus volcanes activos sin un triste aparatejo que les avise de que vienen nubarrones. Lo importante: junto a la llegada de nuevas herramientas y metodologías (lo de los drones y los satélites lo cambia todo), los expertos creen que hace falta coordinarse mejor entre los distintos especialistas de cada rama para poder llegar a integrar todos los aspectos de una erupción —gases, geoquímica, seísmos, etc.— en un modelo que lo interprete todo junto. Esa era la clave del reportaje que publicamos sobre las lecciones que se aprendieron durante la erupción de El Hierro en 2011, donde reinaron el caos y las divergencias, para que esta de La Palma haya disfrutado de una mejor coordinación. Conocimiento, coordinación, modelos: así es cómo lograremos pronosticar volcanes. Y aun así, como me advierte el vulcanólogo Marc-Antoine Longpré: "Hasta cierto punto, ¡cada volcán tiene su propia personalidad! Todos los esfuerzos de predicción son importantes, pero algunos volcanes seguirán sorprendiéndonos". Creo que después de tantos meses estoy un poco trastornado, pero solo veo paralelismos entre el volcán y la covid. Por ejemplo, que cuando hablamos de "erupción" o de "pandemia", en realidad estamos encerrando en una sola palabra un fenómeno complejísimo con innumerables factores y derivadas que lo hacen casi imposible de predecir. Y en este momento, cuando todos nos preguntamos qué pasara con la variante ómicron, vuelvo a ver esas similitudes. En este caso, sobre la necesidad de aceptar la incertidumbre allí donde todavía la ciencia no ha podido establecer certezas. Y acostumbrarse a actuar cuando llegan los nubarrones. 2. 🦠 Mientras conocemos a ómicron A falta de cerrar información más concreta sobre esta nueva variante —la ciencia tiene sus tiempos, incluso cuando los aceleramos—, vamos recopilando mejor información sobre otros debates que nos inquietaron en el pasado. Por ejemplo, que los casos de trombos provocados por la vacuna de AstraZeneca están relacionados con una respuesta autoinmune errónea. ¿Se acuerdan del pánico que generó este episodio, sobre todo entre los gobiernos? Por otro lado, un estudio publicado en The Lancet indica que las vacunas de refuerzo contra la covid son seguras, pero ofrecen una eficacia variable. Después de algunas dudas, ahora sabemos que los efectos secundarios son "aceptables" para todas las combinaciones de pinchazos. - El domingo publicaremos un reportaje infográfico que detalla lo que sabemos hasta ahora de ómicron.
- Hoy hemos publicado una entrevista al biólogo Guillermo López Lluch: "Hay que pasar del estado de histeria al de vigilancia ante la variante ómicron".
🧛🏼♂️ Lo que hacemos en las sombras - El 9 de diciembre estaré en el XVII Congreso Internacional de la Asociación de Historiadores de la Comunicación para hablar de cómo se han tratado las pandemias en la prensa a lo largo de la historia.
¿Nos ayudas? Reenvía este boletín a tus contactos o diles que se apunten aquí. Puedes escribirme con ideas, comentarios y sugerencias a javier@esmateria.com o a mi cuenta de Twitter: @javisalas | 
No comments:
Post a Comment
Note: Only a member of this blog may post a comment.